"Todo y nada"

Dejar de existir
Encontrar la paz por completo.
Esa paz que antes de conocerte tenía y hoy no tengo.

Yo si lo estoy. El daño que he sentido ha sido demasiado grande,
es como recordar otros daños de las personas que mas he amado.
Ya no quiero mas.

Solo mi padre era quién podía sacarme de este estado. Hoy quiero irme con el. Solo recordarlo las lágrimas comienzan a caer a mares, como ahora en silencio, y es peor que lo hiciera en forma escandalosa, por que nadie me ve, nadie me siente, nadie lo sabe.

Tal vez siempre lo estuve, sin darme cuenta, ahora amo a la muerte.

No es depresión, estoy segura.
Es como tener la sensación de haberlo hecho todo, y no querer asombrarme con lo que pueda venir.
Me da lo mismo.
Y vuelvo a llorar, cada vez que pienso en el, me quiero ir al cementerio.
Y no volver.

Nadie puede estar enamorada de la muerte...
¿que sientes ?

Siento ganas de no existir, irme al cementerio y quedarme allá.
Que puedo hacer...?
Dime...

Nada...reparar el daño causado lleva tiempo.
Tiempo que las heridas cicatricen.

Tengo todas las ganas de reparar lo malo, pero no se lo que he hecho malo.

¿Cómo?...si no puedes devolver el tiempo hacia atrás, tampoco te puedes meter en mi mente, y menos puedes quedarte conmigo.

A mí nadie me vigila, nadie me dice nada de lo que dejo o tenga que hacer.

Sientete orgullosa de haberme herido como nadie lo había hecho.
Otra vez lloro. No es miseria como tu lo llamas.
Si eres mala por dentro, sin darte cuenta, cuando no consigues lo que quieres, haces daño y mucho...conmigo lo hiciste.

Soy yo la que tiene que alejarse, aunque me muera por contestar, no lo hago, voy a tener que conseguirlo, de lo contrario me muero.

Cargar con la cruz de una mala relación.
¿te parece poco?
No tener la fuerza para alejarte, después de haber estado tan decidida a hacerlo.

Tal vez siempre lo estuve, sin darme cuenta, ahora amo a la muerte.

Sigo estando entera como mujer.
Sigo siendo una gran mujer.
No tengo miedo, solo a los temblores, no tengo dudas.
Me las sigo disfrutando todo en mi vida, hasta la pena mas grande como esta.


Tal vez siempre lo estuve, sin darme cuenta, ahora amo a la muerte.

Ganas de no existir, de irme al cementerio...

Todo y nada.

Es el juego de la ruleta.